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Empezaremos desde el principio, en todo baño el primer paso antes de existir es realizar una obra, una vez terminada la obra deberemos deshacernos de todos el polvo que está ha causado y dejarlo bien limpio para poder empezar a utilizarlo. Cada material necesita un tratamiento de limpieza, no es lo mismo eliminar silicona que cemento. Si has mantenido una parte de los azulejos antiguos, puede que se hayan manchado de algún producto que haya podido salpicar. En el caso de los azulejos nuevos, también tendrás que darles una repasada por los fragmentos de polvo inevitables de la obra. En cuanto a los platos de ducha, como ya comentamos la semana pasada son de materiales variados, lo que quiere decir que cada plato necesitara una forma distinta de limpieza, pero son fáciles de limpiar al igual que las mamparas, las cuales en algunas marcas como Duscholux el tratamiento ya está incorporado en el cristal desde el momento de la compra, pero por si lo contrario dispones de una mampara más antigua sin el tratamiento incluido en nuestra web puedes encontrar productos anti cal que te facilitaran la limpieza de tu mampara.
Limpieza de los azulejos después de la obra
Como ya hemos mencionado asegúrese de eliminar todo el polvo residual de la obra. Nos centraremos más en explicar la limpieza de los azulejos, ya que viene a ser un tema del que poco se habla en comparación a todos los demás materiales que encontramos en el baño, puede ser que al pensar que debes limpiar todo el polvo generado por la obra de tus azulejos te abrumes, pero verás que es mucho más sencillo y práctico de lo que crees. Nuestra recomendación es que friegues primero todos los azulejos con una esponja mojada con un poco de lejía y detergente hasta que obtengas espuma. Luego deja que la solución se asiente sobre los azulejos y cuando se vuelva viscosa, retírala con un paño. Los paños de microfibra son ideales para realizar este trabajo, pero necesitarás varios porque cuando están demasiado húmedos tienden a dejar manchas. Verás que si solo hay una fina capa de polvo sobre los azulejos será suficiente con frotarlos con un paño de microfibra humedecido con un producto limpiador de superficies para el baño. Por otro lado, te recomendamos que no uses productos multiusos si te enfrentas a manchas como el cemento o la pintura seca. Muy a menudo, cuando se instala un nuevo váter, se dejan restos de cemento alrededor de la base. Si hay gotas de cemento en las baldosas del suelo, tendrás que eliminarlo utilizando la parte posterior de un cuchillo. Sobre todo espera a que el cemento u hormigón este seco, será de la mejor forma en que podrás eliminarlo y así con la ayuda de un cepillo podrás retirar la película de cemento restante y luego barre el polvillo con una escoba.
Como quitar silicona de tus azulejos
Puede ser que eliminar silicona de nuestros azulejos sea más laborioso, pero en verdad es mucho más sencillo de lo que piensas, uno de nuestros trucos es mojar un trapo en alcohol y frotar los azulejos, haciendo un especial hincapié en las zonas con restos de silicona. Tras 10 minutos de espera para que el alcohol actúe, vuelve a pasar con una esponja o un trapo limpio la superficie para retirar definitivamente la silicona.
Productos para limpiar el baño
Tenemos infinidad de productos para limpiar nuestros baños, debemos ser siempre consientes de que el producto que usaremos no desgastara o deteriorara el material que estemos limpiando. Vamos a comentar una cuantas zonas del baño y como deben ser limpiadas, las que nosotros creemos que pueden ser las que se deben limpiar de forma más consiente. Después de una obra, el polvo puede tardar un par de semanas en caer del todo, así que asegúrate de darle tiempo al polvo, para que la limpieza a fondo que se realice sea efectiva. Recuerda que el polvo generado durante la obra se habrá colado dentro de los armarios y cajones, así que recuerda limpiarlos también con un paño de microfibra para que queden libres de polvo. En cuanto a la limpieza de nuestro suelo, una vez hayamos esperado a que todo el polvo haya caído y se haya asentado, lo podemos limpiar con un producto convencional de limpieza de suelos e incluso mezclarlo con un poco de lejía para desinfectar bien toda la superficie. Lo mismo pasará con nuestro váter o bañera, incluso bidé, suelen ser por normalidad de cerámica un material muy respetuoso con los productos convencionales que usamos a diario para la limpieza, así que no tendremos ninguna dificultad a la hora de encontrar un producto eficaz que elimine los residuos de suciedad. En cuanto a la limpieza de nuestra mampara, la cal se acumula en las paredes y en la mampara de la ducha formando manchas blancas. Para eliminarlas, además del mantenimiento diario, se pueden utilizar productos de limpieza domésticos o de origen natural como desincrustantes: vinagre blanco, bicarbonato de sodio, zumo de limón, solución a base de ácido cítrico…
Pero nosotros te aconsejamos nuestro Tratamiento Antical EnduroShield GME, mucho más sencillo y práctico, un producto que te ayudara no solo a limpiar con facilidad sino a obtener una limpieza más duradera. Finalmente, la limpieza de nuestro plato de ducha es también muy importante, primero de todo deberemos saber de qué esta hecho nuestro plato de ducha, no todos los materiales de los platos pueden ser limpiando de la misma forma, incluso podemos contactar con el fabricante de nuestro plato para que nos aconseje en como debe ser limpiado. En los últimos años, uno de los platos más vendidos y usados es el plato de resina, quizás por la facilidad de su limpieza. Los platos de ducha de resina a menudo se llaman también de carga mineral, pues en realidad su composición es una mezcla de resinas y mármoles. Es relevante saber que muchos de estos platos están recubiertos de gelcoat, que es un material transparente de protección, aunque otros muchos utilizan laca acrílica. Sea uno u otro el que lleva tu plato de ducha, tendrás que optar por una limpieza no demasiado agresiva, pues podría dañar esta capa superficial y fundamental. El consejo número uno es el de mantener en buen estado el plato de ducha, para lo cual es recomendable pasar una bayeta o una esponja bien escurrida después de cada uso, con el fin de retirar los restos de humedad y espuma que pudieran quedar. En lo que a limpieza se refiere, lo más recomendable siempre es el agua con jabón neutro. Soluciones caseras como el vinagre pueden no dar buenos resultados, ni siquiera cuando el objetivo sea limpiar la cal del plato de ducha de resina. En ese caso, es preferible emplear productos específicos contra el óxido de calcio.
